.

Blog sobre la Enseñanza y Divulgación de la Física


lunes, 26 de abril de 2010

Equipos de tratamiento contra el cáncer inaugurados por Alan García en diciembre aún no funcionan

Essalud paga US$2 mlls. a clínicas cada año por mal manejo de área oncológica. Nuevos equipos de radioterapia no se usan por demoras administrativas.

Por: Fabiola Torres López

—¿Por qué aún no funciona el nuevo servicio de radioterapia? —pregunta una paciente en silla de ruedas que está en lista de espera para usar la antigua cámara de cobalto del hospital Rebagliati , el único equipo operativo de Essalud en Lima para este tratamiento contra el cáncer.

—No se preocupe. Si no llegan a atenderla aquí, la pondrán en lista para que reciba sus sesiones en una clínica, le dice una enfermera.


 
Desde hace más de tres meses, muchos asegurados tienen esta misma interrogante porque recuerdan que el Centro de Alta Tecnología, donde se ubican los nuevos equipos oncológicos, fue inaugurado el 9 de diciembre pasado por el presidente Alan García y el jefe de Essalud, Fernando Barrios . Esa presentación pública fue anunciada como un paso importante para reducir la brecha en equipamiento médico en el seguro social y como el fin de una etapa de millonarios contratos de tercerización de servicios con centros privados. Sin embargo, esta no es la realidad que viven miles de asegurados en los hospitales.

GASTO SIN PLANIFICACIÓN

“Tengo cáncer de cuello uterino avanzado. El doctor me dijo que necesito 20 sesiones de radioterapia. Vengo de Iquitos a Lima porque allá ningún centro cuenta con este aparato”, relata Gloria, como pide que la identifiquemos en este reportaje .

El epidemiólogo Ebert Poquioma, encargado del registro del cáncer en el Perú, indica que cada año se detectan 42.000 casos nuevos de neoplasias y el 70% de pacientes requerirá radioterapia en algún momento de su enfermedad. Este tratamiento consiste en emplear rayos X en la región del tumor del enfermo para eliminarlo o reducirlo.

Sin embargo, después de Haití, el Perú tiene el déficit más alto de la región en equipos y profesionales especializados en este campo. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda contar con un equipo de radioterapia por cada medio millón de habitantes, lo que para nuestro país significa 54 máquinas, pero solo hay 18 operativas, la mayoría concentrada en Lima y en manos de centros particulares.

Sin políticas preventivas de salud y sin planificación de su servicio oncológico, desde el 2004 Essalud paga dos millones de dólares anuales solo en comprar sesiones de radioterapia a sus pacientes en centros privados. En la última década desembolsó 15 millones de dólares, según reportes del Sistema Electrónico de Contrataciones y Adquisiciones.

Los beneficiarios de todas las licitaciones fueron el Centro de Radioterapia de Lima, las clínicas San Pablo, Internacional y Ricardo Palma, así como el pequeño grupo privado Radioncología S.A.C.

EQUIPOS Y PROFESIONALES

El problema de Essalud es que aun contratando a terceros solo cubre la mitad de la demanda anual de sesiones de radioterapia de sus asegurados.

“De un promedio de 5.000 pacientes que necesitaron en un año este tratamiento, solo atendió a 2.500 en el 2004. Esta demanda anual insatisfecha se mantiene”, revela el radiooncólogo Luis Barriga Tantaleán, uno de los dueños del Centro de Radioterapia de Lima.

¿Dónde están los tres aceleradores lineales que compró Essalud en el 2006 para incorporar la radioterapia en sus hospitales? Por inexplicables demoras y decisiones administrativas, hasta la fecha solo un equipo instalado en Arequipa está en uso, pero carece de médicos radiooncólogos para atender a los pacientes.

DATOS DEL SERVICIO

Todo servicio de terapia de rayos X debe funcionar en un búnker, es decir, un área adecuada y segura para la irradiación a los pacientes que lo requieren.

Sin embargo, Essalud adquirió los aparatos sin construir antes dicho ambiente y, por más de dos años, estos fueron almacenados en Aduanas. El búnker del hospital Rebagliati se empezó a construir recién a fines del 2008 aun cuando su creación estuvo planificada desde el 2003.

¿Por qué no se previó esta condición básica y demoró tanto la obra? El médico Walter Higueras, quien es gerente de la red asistencial Rebagliati desde el 2006, traslada esta responsabilidad a sus antecesores y afirma que durante su gestión “se tomó una decisión valiente de invertir en equipos porque antes el dinero se iba en tercerizaciones como agua por el caño”. Lo cierto es que hasta la fecha el nuevo centro de terapia de rayos X del Rebagliati no funciona y desde hace tres meses se les dice a los pacientes que el proveedor está calibrando el equipo. Higueras calcula que la segunda semana de mayo empezará la atención y así prescindirán del servicio de las clínicas.

Pero los proveedores privados saben que esto no es verdad: la demanda de sesiones de radioterapia en Essalud sigue creciendo. Para atender este año las 178.000 sesiones proyectadas (cada paciente requiere varias), los hospitales del seguro social deberían contar con seis máquinas y apenas tendrán dos en uso.

La construcción del búnker del Rebagliati y los costos del acelerador lineal, el tomógrafo y el resonador magnético que alberga, significaron una inversión de S/.23 millones de soles.

El tercer acelerador lineal comprado debería funcionar en La Libertad, pero no está listo el búnker y faltan médicos especialistas.

INEN EN SITUACIÓN EXTREMA

Mientras que en Essalud se compran equipos sin planificación, el Instituto Nacional de Enfermedades Neoplásicas (INEN) —el principal centro de salud público especializado en cáncer— ha llegado al extremo de recortar los protocolos de las radioterapias para que más enfermos usen las pocas máquinas operativas por día.

“Solo tenemos cuatro aparatos en uso [otros dos están malogrados]. Dos máquinas de cobalto se compraron el año pasado, pero los otros dos equipos funcionan con interrupciones por su antigüedad”, dice Gustavo Sarria, radiooncólogo y director de Control de Cáncer del INEN.

Esto ha generado que algunos pacientes derivados de provincias abandonen su tratamiento porque no tienen dónde quedarse en Lima a esperar el día de su sesión. La opción de ir a un centro de radioterapia particular es onerosa: cada sesión cuesta entre 200 y 300 soles. Y normalmente los enfermos necesitan varias.

Sarria indica que si bien hace cinco años se inició la descentralización del tratamiento del cáncer en los hospitales, esta no será real sin servicios implementados de radioterapia porque las personas seguirán viajando a la capital. En los hospitales Goyeneche (Arequipa) y Belén (Trujillo) hay dos máquinas de cobalto de la década del sesenta que se usan pese a que han sobrepasado su tiempo de vida útil y ya no son seguras para los pacientes.

CLAVES

1. La falta de equipos de radioterapia ha generado también la escasez de profesionales especializados en este campo. En el INEN y en Essalud hay 16 médicos radiooncólogos, pero se requiere por lo menos el doble. Este es otro de los problemas que enfrentará Essalud para poner en marcha los centros de alta tecnología en Trujillo y Arequipa.

2. Unas 1.080 sesiones de radioterapia mensuales solicita Essalud a clínicas en Lima. Este Diario se comunicó con todas las empresas mencionadas como proveedoras para solicitar detalles de sus contratos, pero, a excepción del Centro de Radioterapia de Lima, ninguna respondió a nuestra solicitud.

3. Se ha calculado que para el 2015 Essalud detectará 8.334 casos de cáncer, los cuales requerirán 208.340 sesiones de radioterapia. Para que el seguro social prescinda de los servicios privados, deberá contar con siete equipos y un mínimo de 14 radiooncólogos, 14 tecnólogos y 7 físicos médicos.

No hay comentarios.:

Edmar - Física. Con tecnología de Blogger.