Ronald Woodman: A mis 75 años me veo bien físicamente

Por Susana Mendoza

Lima, ene. 11 (ANDINA).- Su primera ambición fue ser marino en su adolescencia. A sus 75 años, Ronald Woodman es uno de los científicos más importante de nuestro país y acaba de recibir un homenaje por sus cinco décadas de trabajo en el Instituto Geofísico del Perú.

Ronal Woodman. Caricatura

¿He observado que lo quieren mucho en el IGP, le gusta?

-Los que han trabajado cerca de mi, hasta cierto punto si creo que me quieren…

¿Siente su amor?

-Uhmmm, no tanto como usted me lo está describiendo, je.

Ha cumplido 50 años en el IGP, ¿se pasaron muy rápido los años?

-Muy rápidamente.

¿Le preocupa?

-¡Lo que me preocupa son los años que vienen! Cómo voy a caminar, si voy a tener una vejez saludable.

¿Cómo se ve usted, yo lo veo guapísimo?

-¿Ah?...este…yo me veo bien físicamente, no más que este año me han empezado a doler los huesos, la espalda sobre todo cosa que no me sucedía.

Pero usted esquía…

-Sí, por esa razón ejercito un poco la columna y me siento mejor. Me levanto un poco tieso, pero el ejercicio ayuda. No me preocupa pero uno empieza a compararse. Veo a uno de 80 años, y me digo si seré así, o veo de 90 y me pregunto si llegaré.

¿La curiosidad científica se le ha agudizado?

-Ni se ha agudizado ni se ha extinguido, sigo investigando, y encontrando respuestas a problemas existentes en el campo de la ciencia. Las criaturas le preguntan a su papá, yo todavía busco…

¿Tiene alguna curiosidad que no tenga que ver con la ciencia?

-Me gusta Wikipedia, es una maravilla, es una enciclopedia, formulo una pregunta y encuentro las respuestas, jajaja.

¿La inquietud científica y la intelectual son la misma?

-No se cómo define usted la inquietud intelectual. Pero a todos nos gusta saber, la diferencia del científico con el profesional común o la persona común, es que es un estudiante eterno.

¿Es verdad que su curiosidad por la ciencia empezó en un colegio público de Piura?

-Estudié en el colegio nacional San Miguel de Piura, y no me despertó la curiosidad científica, sino que viví una experiencia que cuando la comparo con el actual sistema de educación, me da pena que se haya abandonado algo que experimenté…

¿Y qué fue lo que experimentó?

-Mi profesor de botánica era ingeniero agrónomo, el de matemáticas, ingeniero civil, de literatura era periodista, y el de religión, un cura. Eran profesionales que les gustaban la enseñanza.

¿Con qué pregunta se dio cuenta que quería hacer ciencia?

-Derivé en la ciencia. No fue un objetivo que tuve. Primero quise ser marino, luego ingeniero mecánico porque me gustaban los fierros, cuando ingresé a la universidad encuentro que la electricidad era más interesante, en Estados Unidos hice un post grado en electrónica, porque había pasado de moda la electricidad, regreso al Perú, pero estaba sobre calificado, vuelvo a Estados Unidos y trabajé como ingeniero electrónico en la Nasa…

¿Cuántos años tenía?

-27 años, me fui casado con un hijo, y allá nació otro. Terminé un doctorado becado, hice una tesis sobre el Observatorio de Jicamarca, y regresé al Perú a hacer física aplicada y desarrollándome en el campo de la ciencia como investigador.

¿Está satisfecho?

-Soy una persona feliz creo yo, si me comparo con el resto. Es una suerte, los únicos muertos que tengo en la familia son los abuelos, mis padre a los 92 y mi madre a los 90. Tengo hijos que aprecio y me aprecian; somos unidos con mis hermanos.

¿Qué tipo de música le gusta?

-Ahora de viejo ya no escucho música, de joven oía más. Antes llegaba a mi casa y ponía música, ahora llego y me acuesto, qué rico, jajaja. No me gusta la televisión, me gustan las películas pero no me gusta llorar o sufrir como a mi esposa.

¿Tiene sentido del humor?

-No soy chistoso, y a veces prefiero no contar chistes por temor a que no se rían.

¿A los 75 años, se siente provinciano o limeño?

-Soy un ciudadano del mundo.

¿Un científico tiene que ser filósofo?

-La ciencia y la filosofía eran lo mismo hace muchos años, y recién cuando el conocimiento en sí tiene una base científica que no es cuestionable se desprende de la filosofía y esta queda sólo en lo especulativo.

¿Habría que recuperar la conjunción filosofía ciencia?

-No, porque es una cuestión de definición. Soy una persona que le da mucho valor al conocimiento y este tiene diferentes disciplinas: biología, historia, matemáticas y de todas ellas puede haber filosofía.

¿El conocimiento es la base del desarrollo?

-Por supuesto, y es la base de la riqueza de un país. Yo aconsejo a mis hijos y nietos que tienen que adquirir conocimiento para sacarle provecho a estos tiempos.

¿En el Perú se busca conocimiento?

-La sociedad peruana no aprecia el conocimiento, y una manera de verlo es que todavía no se asigna presupuestos a las universidades, escuelas de post grado e institutos de investigación.

¿Hace cincuenta años llamaba la atención un científico alto, blanco de ojos azules?

-Yo creo que hay mucho prejuicio. Los norteamericanos tiene la culpa porque cuando quieren poner a un joven interesado en la ciencia lo ponen con lentes grandes, cabeza cuadra y feo.

Pero no es su caso ¿se sentía raro?

-No, la gente no imagina que un científico pueda hacer deporte, bailar o le guste las mujeres.

A usted le gusta todo eso…

-No, jajaja, soy un hombre como todos, la diferencia es que en vez de dedicarle 2 mil horas al futbol, preferí dedicárselo a la ciencia.

¿Qué tienen de peculiar los científicos?

-Mientras no estén con sus pares, usando el lenguaje propio de los científicos, nada.

¿Es usted conversador?

-En provincia se valoriza mucho, y más cuando era joven. Yo hablaba horas con los amigos sentado en la plaza de armas, pero digamos no soy.

¿Se siente adulto mayor?

-¿a partir de los cuántos años?... jajaja.

¿Es de perfil bajo?

-¿En qué sentido una persona puede ser de perfil bajo? ¿Ir a una reunión y pararse en una esquina para que no lo noten?

Lo veo modesto…

-No me gusta alardear ni parecer más de lo que soy. Si alguien me aprecia es porque esa persona cree que es así.

¿Es romántico?

-¿Qué es ser romántico?

A veces me parece que los científicos están en la estratósfera ¿Me equivoco?

-No. A veces por la naturaleza del trabajo uno está pensando en un problema, llega a la casa y sigue pensando en él y uno se aísla de una conversación y se distrae y la gente cree que estoy en Marte.

¿Es buen bailador?

-Bailo bien el vals, me aplauden, jajaja.

¿Qué le ha dado mayor felicidad en los últimos días?

-Pasar la navidad en familia con mi esposa, hijos, que son seis y mis nietos que son 12. Estuvimos todos reunidos. Sentí satisfacción, pero no sólo porque estuvieron cerca de mí, sino por verlos que entre ellos se quieren y no están separados.

Se imaginó hace cincuenta años que en el mundo iba haber un cambio climático atroz?

-No, esto es muy reciente, y me da pena, ¿qué les dejaremos a nuestros hijos?

(FIN) Variedades